Un nuevo año y ya llegan los Reyes....... Live with high hopes!!

¡Y arrancamos nuevo año, 2016!! Qué barbaridad…… esta noche vieja fue la primera en la que Unai tomó las uvas con nosotros, ya que se despertó justo a las 23:45, pero fue incompleta del todo, ya que David estuvo trabajando hasta pasadas las 24. Así que dimos el salto de año en año sin su compañía y eso fue algo triste. Pero, en cuanto plegó pudo venir a casa y los pekes aún despiertos pudieron darle un besazo de feliz año. Y, sinceramente, seguimos siendo afortunados ya que solo hemos de pensar en las personas en situaciones aún peores. ¡Así que felices de estar juntos fuera la hora que fuera!!

Después de Noche Vieja, la siguiente fiesta… ¡La llegada de los Reyes Magos!! El momento más mágico del año. Donde con solo verles las caras de ilusión, felicidad y sorpresa….Ya me siento la mujer más feliz del universo entero.

Antes de que llegarán los Reyes, un par de días antes hicimos limpieza de esos juguetes que ya ni se los miran y los donamos a un centro de niños de acogida. Mientras le explicaba a Leyre que no todos los pekes tienen tanta suerte, y que los Reyes Magos no pueden traernos muchas cosas, ya que si no el resto de niños del mundo no tendrán regalos. La verdad es que lo entendió a la perfección y estaba orgullosa de poder ayudar a otros pekes.

Además, este año, ya os conté que nuestro lema ha sido “Menos es más”, así que hemos reducido el número de regalos al mínimo y la mayoría de ellos han sido para los dos. También, es cierto, que Leyre tras explicarle que no se podía tener todo, redujo su lista a 3 cositas; un reloj de pulsera, una casita de muñecas y un portátil de la Hello Kitty. Con la ayuda del Lidl y de páginas de segunda mano, pudimos regalarle esos tres deseos.

El día 3 fuimos a entregarle la carta a los pages reales, en compañía de sus amigos, Guiu y Pau. Prepararon su farolillo para ir a buscar a los Reyes el día 5 estaban todos así de contentos!! y es que, ¡fue una pasada!!

El año pasado, a Leyre le daban miedo y apenas se acercó. Pero este año…. ¡Hasta tubo una conversación con él!! A ella, des de bien chiquitita siempre le ha gustado Baltasar, el rey de color oscuro, como ella le llama. Así, que éste año, como marca la tradición fuimos directos al paje de Baltasar. Y que contenta estaba, y que cara de “flipada” mientras hablaba con él, le explicó lo que quería, hasta lo que pedía su hermano. El cual, no quería ni acercarse al paje, ni a los carteros… de lejos sí que les saludaba pero de cerca…. ¡Se agarraba a su Abu como un koala!! Jajajaja.

La noche de Reyes empezó con la cabalgata; aquí nos gusta irlos a buscar al campo de futbol donde salen, y así acercarnos y poder hablar con ellos. Y así fue, Leyre pudo hablar con Baltasar y Melchor antes de que se subieran a su carroza. Después en la cabalgata fue un no parar de recoger regalitos y caramelos. Y como no, saludar a todos los Reyes, Unai se pasó el recorrido diciéndoles adiós con la mano y tirándoles besos. A la vez que ponía esa cara de no saber bien, bien que estaba pasando y alucinando al ver a su hermana tan contenta.

Acompañamos a los Reyes un ratito y después ya nos fuimos a casa de la Tati, mi hermana. Mientras íbamos caminando, nosotros mismos les tirábamos caramelos a los dos y ellos se volvían locos recogiéndolos del suelo. Totalmente ajenos a que éramos nosotros los que los tirábamos y no los reyes.

Este año, nuevamente, con la ayuda de una asociación del pueblo. El Rey Melchor se pasó por casa a dar unos regalos a los pekes de casa. Unai ni acercarse, costó hacernos una foto todos juntos!! Jajaja Pero Leyre…..Leyre estaba fascinada, totalmente alucinada de ver ahí, en casa de su tati, al rey Melchor con regalos con sus nombres. A penas podía articular palabra y lo miraba con una cara… que a mí me mataba.

Así que des de aquí quiero dar las gracias a todas las personas que han hecho posible esto, los que se disfrazan y van a las cabalgatas, los que van de casa en casa regalando ilusión. Y, sobre todo, a aquellos voluntarios que deciden disfrazarse y pasar por las habitaciones de las plantas de pediatría de los hospitales, regalando sonrisas, ilusión y haciendo que ésos pekes también disfruten de la Navidad como se merecen. Aunque a veces la vida no lo ponga fácil, es maravilloso comprobar que hay gente dispuesta a facilitarla un poquito más las cosas. Mil Gracias y bravo por ellos!!!

……Sonríe, besa, comparte, ama y disfruta de los CORAZONES DE PIRULETA. Con mucho LOVE Laura